En la pequeña población costera de Encrucijada la vida transcurre apaciblemente. Las obligaciones del sargento Demáquero Virato no son muchas: velar por el orden y la paz, vigilar los altercados el día de mercado y cuidar que la escasa guarnición bajo sus órdenes sepa dónde tiene cada pie.
Pero el mismo día en que un nuevo magistrado llega a la ciudad, se produce un asesinato en el cenobio que hay en las cercanas montañas y la vida empieza a volverse demasiado interesante.
¿Quién mató al joven aprendiz de herrero? ¿Por qué hay un magistrado en una ciudad que se las ha apañado diez años sin uno? ¿Es el asesino uno de los frates del cenobio o se trata tal vez de un artesano de los gremios?
Y, sobre todo, ¿por qué alguien de origen patricio como Intrubio Polio elige ser magistrado de una ciudad insignificante en la que nunca pasa nada?